13 de enero de 2011

tristento

diminuta ha descubierto
cosas terribles
que los demás ya sabían:
uno nace con el llanto instalado de serie,
pero la risa es una sofisticación artificial.
un lujo.
y como diminuta es cada vez menos diminuta
en lugar de centrarse en las consecuencias ontológicas del descubrimiento
reivindica derrochar en tiempos de crisis.
rían.
xeira.

2 comentarios:

mónica_f.c. dijo...

diminuta... que grande é o teu diminuto! :)

Andrea Pearson dijo...

Que bueno que vuelvas a escribir en el blog... La maternidad te está sentando estupendamente.