29 de diciembre de 2008

tiramisú

sorprendida a su pesar.
diminuta feliz,
diminuta lombriz.
en lo más profundo del ombligo,
siguiendo las migas de pan
sobre el camino de baldosas amarillas
con carteles de neón indicadores
y el GPS atronándole las orejas
al lado de una pelusa que atascaba el tubo de la aspiradora
y debajo de un puente vertiginoso
diminuta localizó
todo el sentido del mundo,
menos el del ritmo.
le ciel est blanc.

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